Querido amigo Pascual,
me han pedido que haga un post para honrar tu memoria…
lo que me está costando, porque aún no me hago a la idea que no vas a estar aquí.
¿Qué quieren que diga de ti? Quienes te conocíamos, sabíamos que siempre has sido un tipo generoso, bonachón, pendiente de los demás, multitareas e hiperactivo y con mil planes en la cabeza, por poner un pero diría que indeciso a la hora de comprar, menuda tabarra nos distes con la dichosa mochila fotográfica, si conseguiste ser nuestro Pocholo particular, jeje.
Con ganas de vivir y disfrutar cada día, de hacer cosas nuevas, de aprender, de llevar a cabo nuevos retos, aún recuerdo cuando nos contabas que estabais planeando hacer la ruta del desierto de los Monegros en moto y nos echábamos las manos a la cabeza diciendo que ya no erais unos chavalitos, pero bueno no fueron los Monegros pero hicisteis el Camino de Cid, ahí con un par !!
Nos conocimos gracias a un curso de fotografía, una de tus tantas aficiones y de ahí surgió una gran amistad y un grupo de personas con una misma inquietud, divertirse haciendo fotos siempre que hubiese una almuerzo antes y nada de madrugones je,je,je ... aunque madrugamos si fue necesario y aguantamos las largas noches haciendo de fotógrafos grupies de varias orquestas.
Pero como no solo de fotos vive el hombre nos intentaste iniciar en otra de tus grandes pasiones, el tiro con arco, que gran maestro y cuanta paciencia la que tenías con nosotros, porque de “Robines de los Bosques” no tenemos futuro, la cuestión era divertirse y pasar un rato con los amigos.
He tenido la suerte durante 3 años de poder aprender de ti, como fotógrafo y como persona que es lo que más cuenta. Pudimos disfrutar de escapadas fotográficas pensadas de un día para otro mientras disfrutábamos de un helado y por culpa de la famosa frasecita de : “ … a que no hay huevos?”ja, ja, ja ...que peligro de frase. Pero gracias a ella conocimos y disfrutamos de Altea, Aranjuez y Cuenca y eso querido amigo no nos lo quita nadie.
Vamos a echar de menos tu llamadas y mensajes advirtiéndonos de no hacer planes para tal o cual día, porque nos habías apuntado a no sé qué curso o teníamos un desfile de moda al que ir a hacer fotos, en el que no nos pagaban pero nos daban de cenar un piscolabis, o cualquier otra historia en la que nos habías metido.
Hemos perdido a un gran amigo, pero sobre todo a una gran persona, te nos has ido demasiado pronto, aún nos quedaban muchos planes pendientes, muchas fotos por hacer y muchas risas por compartir.
Luchaste como un campeón por estar aquí más tiempo, pero la vida nos jugó una mala pasada, ahora nos vigilas desde ahí arriba a todos, a tu familia y a tus amigos y cuidaras de nosotros. Aquí abajo ten por seguro que no te vamos a olvidar, es difícil, dejaste huella, cada uno de nosotros guardo algo de ti.
Así que amigo, estés donde estés, disfruta de las vistas y haz muchas fotos.
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Foto cedida por Pilar Giménez. |